Reseña: Heartstopper más que palabras

Titulo: Heartstopper más que palabras 

Autora: Alice Oseman 

Editorial: Cross Books 

Trilogía / Saga: Saga Heartstopper 

Nº de paginas: 384 

Charlie nunca pensó que podría gustarle a Nick, pero resulta que ahora son pareja. De forma oficial. Pero no solo eso, también cree que está preparado para decirle esas dos palabras que le provocan vértigo: te quiero.

Nick siente lo mismo que Charlie, pero también tiene un montón de pensamientos rondándole la cabeza: además de plantearse decirle a su padre que tiene novio, cree que Charlie tiene un trastorno de la alimentación.

Las semanas pasan y, en este nuevo curso escolar, Charlie y Nick están a punto de aprender qué significa el amor.

Muchas gracias a la editorial Croos Books por el ejemplar. 

Seguramente a estas alturas todo el mundo conoce la saga de Heartstopper o como mínimo ha escuchado hablar sobre esta increíble saga de novelas gráficas, unos libros que han tenido una muy buena acogida en el mundo de los lectores. Y precisamente la reseña que hoy os traigo al blog es nada más y nada menos que la cuarta parte de esta saga que tanto está gustando. 

Bueno, en esta ocasión nos reencontrarnos nuevamente con Nick y Charlie, quienes finalmente han conseguido superar todas y cada una de las dudas tenía al comienzo de su relación, al igual que los miedos que ambos muchachos tenían, pudiendo así lograr dar el gran paso de hacer oficial su relación y sentirse libres de poder amarse sin tener miedo a ser juzgados. 

Esta vez la autora no solamente nos introduce de nuevo en una historia realmente enternecedora, también nos muestra lo bonito que es poder amarse sin miedo y sin necesidad de esconderse, por no mencionar la cantidad de momentos tiernos que nos regala en todo momento y hace que todos los lectores de esta saga no solamente se enamore de sus protagonistas, también de ese romance tan bonito entre ambos chicos.

Sin embargo, una vez más nos encontramos con ciertos dilemas, con ciertas dudas o inseguridades que son más que normales en una relación y más cuando eres un adolescente, las cuales veremos plasmadas en Charlie, quién sabe que está más que preparado para dar el salto y decirle a Nick, que le quiere pero, no tiene el valor suficiente para decírselo por temor a que sea demasiado pronto. 

Realmente me ha encantado la manera en la que la autora plasma esa incertidumbre, pues decir te quiero nunca es demasiado fácil y nunca se sabe en qué momento exacto decirlo y más cuando se lleva poco tiempo de relación, pues aunque una persona esté lista para dar ese salto y exponer sus sentimientos tan abiertamente a tu pareja, nunca se sabe si la otra persona siente lo mismo que tú o si está preparada para escuchar esas palabras. 

Sinceramente, en este cuarto tomo he podido enamorarme aún más de los protagonistas, como también he podido empatizar más con ellos y disfrutar viendo como ambos han ido madurando lentamente y en cómo han ido fortaleciendo sus relación, pero si hay algo que verdaderamente me ha gustado y que sencillamente alabó de esta autora, es la naturalidad que tiene a la hora de mencionar ciertos temas delicados y en cómo ahonda en ellos, haciendo así no solamente una clara crítica social, también dando visibilidad a esos problemas y esta vez me ha encantado ver cómo se habla de las enfermedades mentales, más concretamente se profundiza en los trastornos alimenticios y en la ansiedad que produce el tener que hacer frente a ese problema y asumir que lo tienes. 

Al hablar sobre este tema la autora normaliza de alguna manera las enfermedades mentales y nos muestra la importancia que tiene el pedir ayuda, pues en estos casos el amor por muy grande que sea no puede solucionar nada y la única solución es ponerse en manos de personas que sí pueden ayudarte a mejorar y a aceptar el hecho de que tienes un problema, de verlo y aceptarlo, como también aceptar que para poder ir mejorando siempre es necesario pasar por alguna recaída. 

En conclusión "Heartstopper: más que palabras" es una historia con la que he reído en muchos momentos, con la que también he llorado y con la que me he sentido identificada en algún que otro momento. 

Es un libro sencillamente hermoso, con un romance adorable y unos protagonistas que nos enamoran una y otra vez, además ha sido una lectura sumamente adictiva y de la que he disfrutado en cada momento.